En las imágenes, podrán apreciar la alegría que reinó mientras cada uno ponía de su parte para la realización del mencionado producto... recordamos que muchas horas antes, ya había comenzado este proceso, con la preparación de los ingredientes. Agradecemos a todos los que se presentaron en el lugar y pusieron su esfuerzo para la cocción del mbejú... y a todas las personas que año tras año son los infaltables protagonistas. Que Dios se los pague amigos y hermanos en Cristo.